El desarrollo del comercio exterior

El desarrollo del comercio exterior

viernes, 5 de noviembre de 2010

El desarrollo del comercio exterior

EL DESARROLLO DEL COMERCIO EXTERIOR
La llave para contrarrestar la crisis económica general se llama “Comercio Exterior” aunque son pocos los países que comprenden y apoyan eficazmente esta verdad. Si nuestras economías han sido afectadas por grandes descalabros en los grandes capitales, con mucha más razón hay que buscar más ramas en donde podemos apoyar los desequilibrios internos.
El problema está en que no se ha creado cultura de Comercio Exterior y se confunden los conceptos y prácticas. Para que un país tenga verdaderos resultados positivos en su Comercio Internacional, se requieren programas muy activos y muy bien diseñados para lograr la creación de nuevas micro empresas que exporten nuestros productos y a la vez vayan transformando la oferta con muchas innovaciones. Así como el desarrollo de los productores grandes y medianos, que no deben atenerse y menos con la auto dependencia que hemos creado nosotros mismos con los Estados Unidos, porque no sabemos las posibles sorpresas de cambios drásticos que pueda dar esa economía. Por tanto es el momento de diversificar eficazmente nuestras posibilidades de negocio.
Menos mal que las grandes empresas logran por su cuenta hacer buenas cuotas de exportación, con sus propios medios, de lo contrario estaríamos mucho peor de lo que estamos.
El comercio exterior es generador de riqueza y desarrollo porque aplica una dinámica multiplicadora en toda dirección, por tanto es el medio idóneo para generar empleo.
Sin embargo parece que no se llega a comprender del todo, como se puede llegar a crear esa cultura de comercio exterior. Mientras sigamos gastando tiempo y dinero en solo generalidades, no llegaremos a crear esa cultura que propicie un gran desarrollo.
En otras palabras, damos mil vueltas para llegar a un lado. Se gasta una eternidad para aterrizar en temas concretos que muevan a los emprendedores y a los que ya empezaron a manejar eficazmente sus acciones para ampliar sus mercados. Si se miran estadísticas de ventas internacionales, verás que muchas empresas han incursionado en países en los que solo vendieron apenas nada, debido a que no saben cómo moverse en los esos mercados, ni como negociar.
Tampoco se desarrollan conceptos innovadores, para incursionar con éxito los grandes mercados, ni se facilitan los medios para hacerlo. Da la impresión de que el “Comercio Exterior” esta burocratizado y solo contempla las opciones de algunas herramientas que no son generadoras de negocio, a las que si lo pueden ser. Dicho de otra forma, se usan algunas herramientas simples de carpintero, pero sin la técnica, para poder hacer ni una silla, ni tampoco venderla.
Cuando se tienen pocos recursos tanto de dinero como de recursos de la tierra que representen valores importantes, hay que usar más la imaginación y la determinación de hacer lo infinito para estimular las exportaciones. Hay muchos ejemplos como el de Taiwán, que siendo un país pequeño como nosotros, es un gran éxito en su Comercio Exterior.
Muchos piensan que con unas cuantas medidas institucionales puntuales es suficiente, por eso nunca equilibran su balanza por lo que siempre salen debiendo y no se genera la actividad comercial necesaria, para crear la suficiente riqueza y bienestar que llegue a mucha gente. Es un reto que solo quienes se salgan de la línea de lo evidente podrán ver y aplicar.
Lo que se requiere es llegar a tener una “VISIÓN ESTRATÉGICA REAL” y no sustentada en racionalismos teóricos que no llevan a ningún puerto. Se pueden construir grandes proyectos que representen una verdadera fortaleza para el país que sepa llevar a ese camino, pero es indudable que tendrán que salirse de lo establecido y crear programas audaces que multipliquen las opciones, para llegar a la excelencia del Comercio Exterior. No importa que tan pequeños seamos, ni las limitaciones que hay, si se tiene la determinación y el camino correcto, la meta es perfectamente posible.
Esta es la mejor incubadora de empleos, si se tiene la visión de cómo hacerlo.
Luis Vides